caminahora

¿Por qué no?

“Nuestra mayor gloria no está en no caer nunca, sino en levantarnos cada vez que caemos” – Confucio.

He querido empezar este post con esa frase memorable, puesto que es la clave para triunfar en la vida: no tener miedo a caer.

Resumiendo un poco mi pasado, soy un arquitecto técnico que terminó la carrera en Sevilla en el 2008, año en el que la crisis española empezaba a hacer muchísimo daño a nuestra profesión.

Con mucho esfuerzo y suerte conseguí un trabajo en prácticas como ayudante de jefe de obras, que prosperó a jefe de obras a los pocos meses. Estuve soportando condiciones bastante mediocres (debidas a mi experiencia y a la crisis del sector). Por desgracia, y al igual que muchas otras empresas, ésta entró en concurso de acreedores.

Siempre había querido saber inglés. Esto iba más allá de lo profesional, el simple hecho de entender una canción, una película o mantener una simple conversación, eran mis objetivos principales. Por lo que empecé a organizar mi viaje a Reino Unido, en el que haría mi sueño realidad.

Al mes de terminar en la primera empresa, y con gran parte de mi expedición preparada, me llamó otra. Me ofrecían seguir con mis obras anteriores, las que la otra empresa había dejado paradas. No pude rechazar esa solicitud, puesto que había muchas personas que me necesitaban en ese puesto. Eran obras públicas y de un gran interés curricular, así que decidí dejar mi sueño a un lado y seguir adelante.

Castillo de Guzmán el Bueno en Tarifa (Cádiz)

Fueron bonitos, aunque duros años luchando en plena crisis. En los que pude ver que no todo el mundo está hecho para esta profesión, puesto que muchos de mis compañeros acabaron dejándola y cambiando drásticamente de sector.

Acercándose mi 29 cumpleaños y después de casi 8 años en la profesión, empecé a reflexionar mucho. Me preguntaba a mi mismo ¿Qué quieres hacer con tu vida?, ¿No querías viajar?, ¿No querías aprender Inglés?, ¿Por qué no?

Tras mucho miedo y confusión, decidí cambiar mi futuro y lanzarme a por mi sueño. Ahí me dí cuenta de que es verdad todo eso que dicen sobre la zona de confort, una vez que la sobrepasas te sientes libre y muy orgulloso de tí mismo.

Mi nivel de inglés era muy pobre, hasta me costaba recordar el nombre de los colores, así que decidí inscribirme en una academia en Edimburgo (Escocia) en la que estuve aprendiendo inglés durante 3 meses. Sólo fui a estudiar, puesto que tenía mucho que mejorar. Iba a clase por las mañanas, y por las tardes seguía estudiando en casa. Cuando conocía a algún español, intentaba mantener la conversación en inglés, aunque esa persona insistiera en seguir hablando en español. Siempre fui constante y testarudo para poder conseguir mi objetivo.

Dugald Stewart Monument, Edimburgo (Escocia)

En el tercer o cuarto mes, comenzaron mis reflexiones de nuevo: ¿Por qué no intentas tu profesión aquí?, ¿Por qué no haces lo que realmente te gusta?

Empecé a indagar en el sector, mandé bastantes mensajes vía LinkedIn, en foros, hice muchas llamadas, y la verdad que fue muy frustrante. Todos decían que trabajar en mi profesión en el extranjero sin haber trabajado antes en otra cosa era muy difícil, debido a la barrera del idioma. Aseguraban que eso ya surgiría con el paso de los años. Y de nuevo me pregunté: ¿Por qué no? el “No” ya lo tengo.

Como muchos ya sabrán la profesión de arquitecto técnico no existe en los países anglosajones. Tuve que decidir entre una de las diferentes ramas del sector: Project Manager, Quantity Surveyor o Site Manager, entre otras. Quantity Surveyor fue mi elección. Esta profesión está enfocada principalmente al aspecto económico en la construcción.

Estuve alrededor de mes y medio echando currículums y trabajando mucho en ellos para obtener un buen resultado. Allí todo funciona a través de agencias privadas de Recursos Humanos. Éstas hacen una primera criba y presentan los seleccionados a sus clientes, obteniendo un beneficio por ello, pero es totalmente gratis para el solicitante.

Después de tres entrevistas conseguí un puesto de trabajo como Intermediate Quantity Surveyor en una empresa de obra civil en Irlanda. Esta empresa me acogió como a un miembro de la familia, me ayudaron a progresar muchísimo y conseguí desempeñar mi puesto de trabajo sin ningún problema.

Río Liffey, Dublín (Irlanda)

Debido a mis inquietudes profesionales, a los diez meses decidí cambiar de empresa. Siempre he estado muy interesado en la restauración de edificios históricos y no pude dejar pasar la oportunidad que me ofrecieron. Hoy en día soy Project Quantity Surveyor en el proyecto de restauración integral del edificio histórico Leinster House, el Senado.

Sólo ha pasado un año y un mes desde que llegué a Irlanda, y ya he conseguido algo con lo que he estado soñando durante toda mi carrera profesional. Tengo muchísimo que aprender y que mejorar, pero con esto sólo quiero mostrarles que sólo hay que tener ganas y disciplina. Es cuestión de actitud. El “No” ya lo tienen, y tendrán el honor de caerse, levantarse y conseguirlo solo si lo intentan.

Historic Leinster House, Dublin (Irlanda)

En mi humilde opinión sobre estos países, Reino Unido es impresionante y ofrece unas oportunidades laborales buenísimas, pero el tema del Brexit ha desfavorecido un poco a nuestra profesión. Sigue habiendo demanda, pero no tanta como la requerida meses atrás. Sinceramente, no recomiendo Escocia para aprender inglés a alguien con nivel básico, puesto que tienen un acento muy difícil de entender. La gente es maravillosa y abierta, pero si no tienes un nivel medio o avanzado es mejor que elijas otra comarca o nación.

La República de Irlanda es una buena elección por varios factores que cito a continuación. El acento es muy neutral en la ciudad de Dublín, por lo que después de casi cuatro meses en Escocia, me fue muy fácil entender el acento Irlandés. El sol sale algo más que en Escocia, aunque no deberían crearse grandes expectativas. La gente es realmente abierta, curiosa y es muy fácil entablar una conversación con cualquiera. Fue muy extraño cuando aterricé por primera vez en este país y nadie decía “Hi” o “Hello”, todo el mundo decía “How are you?”, ¡directamente te preguntaban cómo estás! Ésto decía mucho de la hospitalidad irlandesa.

En cuanto al mercado laboral en Irlanda, puedo decir que está en pleno auge, necesitan profesionales en todos los sectores incluido el nuestro. Se está construyendo a un ritmo frenético y no tienen personal para cubrir la demanda exigida, por lo que la mayoría de las empresas son multiculturales.

En el anterior párrafo no quiero dar a entender que sea fácil encontrar trabajo, pero sí que hay muchas oportunidades, por lo que la probabilidad de conseguir algún puesto es muchísimo más alta. Actualmente, recibo emails a diario con nuevas ofertas y la mayoría de ellas son muy tentadoras.

Para terminar, simplemente quiero agradecer la labor de “caminAHORA”, puesto que es muy humanitaria y honorable. Espero que mi experiencia les sirva de ayuda y les dé el empujón que necesitan para cumplir sus sueños. Vida solo hay una, así que aprovéchenla y sáquenle todo el partido posible.

Si necesitan más información o ayuda, sólo tienen que escribirme un privado a mi cuenta profesional en LinkedIn y les ayudaré encantado.

www.linkedin.com/in/jose-lobo-9724044a

 

¡Suerte y a viajar!

Jose Lobo

Jose Lobo es Arquitecto Técnico por la Universidad de Sevilla. Actualmente trabaja como Quantity Surveyor en Duggan Brothers (Contractors) Limited, Irlanda.

1 comentario

Responder a Javier Mendez Cancelar

  • En mi opinión no entiendo cómo puedes decir que hay gente en España que no estaba preparada para el sector,detrás de cada persona hay una historia y es posible que haya gente mucho más preparada para este sector que tú o yo y haya tenido que dejar la profesion por razones personales .

    La mentalidad de decir que la construcción o i gwnieria solo está hecha para tipos duros deja mucho que desear, yo también emigre a R Unido , allí habrás podido ver cómo nuestro sector es mucho más de team players.